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Briseida está cultivando SST en su comunidad cafetalera en México

La “orgullosa campesina” presidenta de una cooperativa cafetalera dirigida por mujeres está difundiendo el mensaje sobre la salud y seguridad en el trabajo.

En la lengua uto-azteca nahuatl, Ixhuatlán significa “donde existen hojas verdes de maíz”.

Por lo que quizás no sea una sorpresa que Briseida Venegas Ramos, nacida y criada en Ixhuatlán del Café, en el estado de Veracruz, México, sea la “orgullosa campesina” hija de granjeros y actualmente presidenta de Vida AC, una cooperativa cafetalera dirigida por mujeres.

A pesar del éxito de la cooperativa, Briseida no lo asume a título personal. Al contrario, es del tipo de persona que habla en plural.

“Nosotras” cultivamos el café, “nosotras” cuidamos de los niños, “nosotras” perseveraremos.

“¿Cómo te involucraste con el café? ¿Cuándo empezaste?”

Briseida tiene 30 años de edad, es formalmente graduada de sicopedagogía y se describe como feminista. Vive con su madre, hermana, tía, tío y primo.

Comenzó a aprender sobre el café cuando tenía ocho años. De adolescente, ya ayudaba a sus padres en actividades ligeras en la plantación. Y hoy, el cultivo del café es una parte tan importante de su identidad que considera a sus compañeros de trabajo como su familia.

Briseida trabaja todos los días del año. Durante el período de cosecha, se levanta temprano para ir al molino de viento y preparar el desayuno antes de salir para la plantación. Fuera del período de cosecha, su trabajo consiste en recopilar leña de los árboles secos para cocinar, así como sembrar e injertar café.

Su trabajo en el campo comienza a las 9 a.m. y termina a las 3 p.m., cuando regresa a la casa para terminar otros trabajos con su familia. Juntos lavan el café recolectado el día anterior.

A pesar de las críticas de sus compañeros, Briseida está motivada por su trabajo y disfruta compartir sus experiencias personales.

Para ella, “un granjero es un gran trabajador”.

Un nuevo tipo de formación

Briseida ya había participado en cursos y talleres sobre temas como autoestima, empoderamiento de la comunidad y soberanía alimentaria cuando escuchó acerca del proyecto del Fondo Visión Cero y el curso de formación sobre seguridad y salud en el trabajo (SST). Era un tema fuera de su repertorio y sentía curiosidad.

La salud siempre ha sido una prioridad para la cooperativa, y la pandemia de COVID-19 ha reforzado ese sentimiento. Los miembros cultivan plantas medicinales y tés para protegerse de enfermedades y dolencias.

Conocen su plantación al dedillo. Sin embargo, nunca han considerado seriamente formar a los granjeros en los principios de la SST.

Los riesgos del trabajo son muchos. Los trabajadores cafetaleros a menudo utilizan maquinaria pesada en la plantación, la cual puede provocar accidentes. La propia Briseida casi se electrocuta una vez mientras operaba una maquinaria con las manos mojadas. Tuvo suerte. El accidente no tuvo consecuencias, pero pudo haberse lesionado seriamente, o peor.

Briseida y su hermana, Irais, hacen una prueba del agua del río. Miden el pH, analizan la calidad y registran los resultados. Ésta es sólo una de las formas en que la cooperativa cuida el medio ambiente.

Galdino, tío de Briseida, transporta los plantones de su vivero a la parcela de la familia. Sigue todas las recomendaciones de seguridad para evitar accidentes mientras monta su mula. Briseida y su tía prefieren caminar.

Briseida se dirige a su parcela, llevando su azada al hombro. Su objetivo es añadir nuevas plantas de café a la plantación. Ahora ella cumple las recomendaciones adecuadas de SST: su herramienta está cubierta y lleva mangas y pantalones largos, botas y un sombrero.

Briseida utiliza una azada para hacer un agujero en la tierra, donde posteriormente se plantará un nuevo cafeto.

Briseida encontró una falsa serpiente de coral en su parcela; la señala con su machete. En la zona viven varias serpientes, algunas venenosas y otras no. Esta última siguió su camino sin problemas.

Briseida utiliza un manual para el muestreo y el análisis del agua. Ella y otros miembros de la cooperativa analizan el río periódicamente. Después, se reúnen para compartir la comida con amigos y familiares.

A través de las actividades de formación del Fondo Visión Cero, Briseida aprendió cómo evitar riesgos como ese. Actualmente, ella y sus compañeros de trabajo tienen conocimientos sobre SST y se cuidan mutuamente en el trabajo. Han aprendido acerca de la importancia del mantenimiento de las maquinarias, especialmente las viejas. Y se han percatado de que necesitaban hacer algunos ajustes, como reemplazar las bombillas o usar medios de protección como guantes.

Cuando se le preguntó acerca de qué aprendió durante el curso, Briseida se conecta con su comunidad y sus tres pilares: calidad de vida, salud y prevención en el trabajo.

“Primero la salud, luego el trabajo. Es importante estar seguros y cuidarnos mutuamente”, afirmó. “Tienes que conocer tu comunidad y actuar como una unidad”.

La perspectiva general

México es el decimosegundo mayor exportador de café Arábica y el principal exportador de café orgánico del mundo, principalmente a mercados como los Estados Unidos, España, Bélgica, Alemania y Canadá. En 2017, la producción de café representó el 6 por ciento de todas las unidades económicas agrícolas del país.

Veracruz es una de las regiones productoras de café más importantes de México. También es el estado con una de las mayores tasas de pobreza en el país. Y el trabajo tiene muchos peligros potenciales.

Aproximadamente el 98 por ciento de los productores de café son de pequeña escala, con menos de 5 hectáreas por cultivo, como Briseida y su familia.

Los factores de riesgo incluyen:

  • El machete, la causa principal de accidentes relacionados con el trabajo en las plantaciones debido a la carga física y las posturas requeridas para utilizarlo;
  • La poda de árboles, que puede traer como resultado caídas y golpes;
  • La fauna peligrosa, como serpientes y otros animales, que representan riesgos biológicos;
  • Los productos agroquímicos tóxicos, frecuentemente espolvoreados, rociados, esparcidos o aplicados como vapor para la fertilización, control de plagas y control de hierbas;
  • El ruido que emiten las herramientas de trabajo, como los cortadores de maleza o maquinarias utilizadas para el beneficiado húmedo del café;
  • La fatiga y el estrés, junto con otros riesgos sicosociales.
  • Fatigue and stress, along with other psychosocial risks

Una visión sobre la seguridad y la salud

No existe información estadística oficial sobre los accidentes de trabajo en la producción de café, por lo que puede resultar difícil comprender dónde existe lugar para las mejoras. Lo que sabemos es que existe una falta general de sensibilización acerca de los riesgos potenciales durante las tareas diarias.

Las cadenas mundiales de valor ofrecen oportunidades para mejorar la SST, incluso – o  especialmente – en las granjas a pequeña escala.

Es por eso que el Fondo Visión Cero promueve intervenciones específicas para evitar los accidentes y enfermedades relacionados con el trabajo en la cadena de valor del café en México.

Redes dirigidas por mujeres en el café

Las mujeres representan el 40 por ciento de los productores de café en México. Ese porcentaje ha crecido entre las asociaciones especializadas en producir café orgánico.

Sin embargo, se considera que la mayoría de las mujeres solo están “ayudando” y no son incluidas en las estadísticas. En realidad, las mujeres desempeñan un papel fundamental en la producción de café, haciendo trabajos como preparar las comidas, llenar los sacos, seleccionar el café, recolectar el grano y mucho más.

Es una razón por la cual Briseida tiene pasión por las redes y alianzas dirigidas por mujeres en el sector del café. Se centra en su propio mejoramiento para su comunidad.

El sexismo es un desafío que enfrentó desde el inicio, porque ya existía una cooperativa local de hombres en su área. Sin embargo, persistió y abrió su cooperativa, que actualmente organiza talleres sobre masculinidad.

Briseida comparte su puesto de presidenta en la cooperativa con otras dos mujeres, quienes también son las hijas de granjeros cafetaleros. La propia cooperativa está formada fundamentalmente por familias y amigos cercanos. Confían los unos en los otros para casi todo.

Después de todo, es gracias a la cooperativa de mujeres que se enteró del proyecto del Fondo Visión Cero y el curso de formación sobre SST.

“Todos tenemos derechos y obligaciones”.

La comunidad y la SST van de la mano

Briseida fue una de las productoras de café que se benefició directamente del proyecto. Actualmente es una defensora de la SST en la plantación y dentro de su cooperativa. Y continúa compartiendo sus conocimientos sobre SST con su comunidad durante reuniones, donde se habla acerca de los resultados de la última exportación de café y se dan sugerencias sobre cómo mantenerse seguro en los campos.

La autosuficiencia, que ya era importante para Briseida antes de la pandemia de COVID-19, es ahora una de las prioridades principales. La cooperativa ya estaba aplicando principios agroecológicos para ahorrar dinero y promover la sostenibilidad.

Después de concluir la formación sobre SST, Briseida comprende que la seguridad y salud en el trabajo es tan importante como garantizar la producción continua y sostenible.

El sueño de Briseida es que la próxima generación transcienda al siguiente nivel. Tiene grandes esperanzas para la cooperativa, la agroecología y el poder del feminismo en su comunidad, y trabaja diariamente para lograr esa visión. Lo que es cierto es que no irá a ningún lugar mientras no lo logre, con toda su comunidad – su familia – tras ella.